Muchos analistas quisieron ver en la emergencia de Vox una suerte de espejo de los fenómenos de extrema derecha europeos, trasladando al caso español profecías ideológicas y electorales que poco se corresponden con la realidad local.
Este trabajo realizado por jóvenes investigadores ataca al punto de flotación de esta comparación burda. La extrema derecha europea, pese a ser relativamente heterogénea, comparte dos características esenciales. Por un lado, una ideología con componentes culturales y económicos que defiende un Estado de Bienestar para los nativos, y por el otro, una base electoral fundamentalmente obrera.
Mediante un riguroso análisis electoral y geográfico, el hallazgo principal de este libro demuestra que Vox no comparte ninguna de estas dos características y por lo tanto no responde a las dinámicas de éxito e implantación de la extrema derecha europea. Vox es un partido ultraconservador económicamente neoliberal y, en consecuencia, su base electoral no es fundamentalmente obrera. En definitiva, no por el hecho de surgir a la derecha de la derecha va a seguir el guion de éxito e implantación obrera del Frente Nacional francés o Alternativa Por Alemania.
Esta investigación explora además aspectos histórico-teóricos como la comparativa fascismo-extrema derecha europea, la extrema derecha en España o la relación entre Vox y el género, la edad y la contradicción urbano-rural.