Una historia colosal que reivindica la no violencia como respuesta a una vida sin esperanza. Al principio eran solo tres. Nubero, Lucio, Izma. Al principio, eran niños. La mar se había alzado, mostrando en todo su esplendor el poder y la complejidad que hasta ahora ocultaba en sus profundidades. Tres niños a la deriva, perdidos en los cambios físicos y mentales causados por la tragedia, que encuentran un vínculo en las mareas y en su deseo de no dañar a ningún ser vivo. A través de unas virtuosas acuarelas cuyos colores transitan entre el amanecer y el atardecer, Emma Ríos lleva al lector a la orilla del mar para observar una historia de eco-horror postapocalíptico en la que la belleza y lo extraño se entrelazan. Los cuerpos de sus protagonistas, que se van diluyendo como la luz de la acuarela, van perdiendo su forma humana, a la vez que perdura una humanidad empática como única respuesta a una sociedad despojada de futuro. “Anzuelo nos invita a pasear y nos pide que escuchemos al mar y conozcamos a las criaturas de la tierra como nuestras colaboradoras en lo que está por llegar. La gran ola vino y se fue y lo que quedó somos nosotros. Estás en buenas manos con la maestra narradora Emma Ríos. Es un viaje precioso. Una novela gráfica imprescindible.” Ann Nocenti, autora de Semillas. “Ríos, cuya sangre fluye del corazón marítimo de Galicia, plasma tanto los fantásticos paisajes marinos de Anzuelo como sus monstruosidades emergentes en delicadas acuarelas, lo que añade una capa de traviesa fragilidad a esta magistral meditación sobre lo que significa ser humano en un mundo violento y sin amarres”. Kelly Sue DeConnick, autora de Bella Muerte.