Desde Japón, una novela sobre la magia de las pequeñas cosasMás de 100.000 ejemplares.
Tras una larga vida con una familia que lo ha llenado de amor, Futa acaba de llegar al más allá. Pero entre el mundo de Michiru, su dueña, y el de este gato atigrado existen puentes que conectan ambos sitios.El Café Pont se encuentra en el limbo y es un lugar de lo más especial: los clientes escriben en una tarjeta el nombre de la persona a la que desean volver a ver y Nijiko, la propietaria, asigna un gato mensajero a cada petición. El trabajo de los mininos consiste en provocar el encuentro y transmitir las palabras que el solicitante y el destinatario jamás se dijeron. Es una tarea complicada y de gran responsabilidad, pero no hay nada que un ronroneo no pueda lograr.