Álvaro Cunqueiro se consideraba el último peregrino medieval. «El viaje es para mí una experiencia poética», afirmaba. Peregrinación y poesía. Estamos ante un texto breve pero de desbordante caudal narrativo, donde cada párrafo se recrea en un suceso, sea real o imaginario, o una combinación de ambos. Lo hemos denominado «el libro olvidado», porque así ha permanecido durante todos estos años. Desde que en 1965 fuese publicado por primera y —hasta ahora— única vez.