Después de calibrar el “LAPSUS CALAMI” (2020) y practicar el “BUEN ERRAR” (2021) nos hemos preguntado esta vez (2022) por qué se desea lo numeroso y se teme lo vacío. Y hemos convertido la expresión latina en una nueva, “ERROR VACUI”, para analizar si lo vacío es erróneo. Los 35 trabajos seleccionados responden así: En (1.) “PUA”, cuatro artículos repasando los efectos de la incontinencia de los medios de comunicación, la política y epistemología del ornamento, la inundación de errores en el laberinto de la red, y sus implicaciones en la educación. En (2.) “VERTEBRADOS”, setenta páginas seguidas mostrando mapas, desbordamientos, escenas, series, geografías, multitudes, escrituras y flujos gráficos. En (3.) “IN/OUT” , la reconstrucción del grutesco renacentista en las habitaciones privadas de Carlos V de la Alhambra, la narración en tiempo real de dolor- comida – cuidados, y el debate sobre original-copia en las malas traducciones. Luego, en (4.) “UN BORDE”, la sorpresa de tres experimentos, y en (5.) “QUIZÁS” la reseña de una colectiva de 26 nuevos creadorxs.