Situada en el siglo xii durante el reinado de Alfonso VII, La venganza de don Mendo es, sencillamente, una parodia delirante sobre la Edad Media. Así, en ella los temas esenciales del teatro clásico e histórico se despojan de toda trascendencia para mostrar una realidad banal y grotesca; el honor se transforma en engaño e infidelidad, y el amor puro e idealizado, en deseo e interés. Se trata, no obstante, de una burla amable, cuya única intención es provocar la carcajada del espectador.