En los suburbios de la ciudad de Túnez, un chico de quince años, víctima de violencia familiar y social, conoce a Bella, con quien comienza una historia de lealtad y amor inconmensurable. Pero dicha amistad no es permisible en una sociedad marcadamente jerárquica y violenta, que incluso ordena sacrificar a los perros "para que la rabia no se extienda entre la gente". Pero la rabia ya está ahí.
Esta breve novela muestra una sociedad en la que el poder nunca cambia de manos, y retrata con brillantez la ira ante la injusticia; la fogosa juventud contra el orden establecido.