Pookins siempre se sale con la suya. Si no es así, se enfurece, grita y tira manzanas. Pero cuando conoce a un gnomo mágico y le pide tres deseos, descubre que tener todo lo que quiere no siempre es una fórmula para ser feliz. Graciosísimo -New York Times Book Review Los niños reconocerán pedacitos de ellos en Pookins -Booklist No te pierdas estos otros cuentos de la serie... Yo primero No fue culpa mía El Mago, el Hada y el Pollo Mágico.