Ciudad más seductora que atractiva, Dublín rebosa de la personalidad típica del que ha transformado el agobio en despreocupación. Aunque la capital irlandesa ha vivido sus penas y glorias en la última década, las considera a ambas como algo ilusorio y sigue generando prosperidad, sobre todo una vez dejado atrás el desastre de la recesión. Los dublineses contribuyen a ello mediante la música, el arte y la literatura, habilidades que a menudo subestiman pero que al evocarlas les llenan de orgullo. En la ciudad hay maravillosos museos, restaurantes y la mejor selección de ocio de toda Irlanda, sin contar con el omnipresente pub, que concentra la vida social urbana y es parada obligatoria para cualquier visitante. Además, cerca de la ciudad hay varias poblaciones costeras donde realizar interesantes excursiones de un día.
• Pasear por los jardines isabelinos del Trinity College.
• Examinar los libros antiguos y los tesoros de la Chester Beatty Library.
• Descubrir la propia vena teatral asistiendo a una obra en un teatro de Dublín, como el Abbey o el Gate.
Incluye: De un vistazo, Puntos de interés, Actividades, Circuitos, Fiestas y celebraciones, Dónde dormir, Dónde comer, Dónde beber y vida nocturna, Ocio, De compras y Alrededores de Dublín.