En estos cuatro ensayos, William Ospina da un análisis sobre la
educación actual y un elogio de la lectura.
«Nuestro tiempo es paradójico y apasionante, y de él podemos decir lo
que Osear Wilde decía de ciertos doctores: "lo saben todo pero es lo
único quesaben". El periodismo no nos ha vuelto informados sino
noveleros; la propia dinámica de su labor ha hecho que las cosas sólo
nos interesen por su novedad: si no ocurrieron ayer sinoanteayer ya no
tienen la misma importancia.
Por otra parte, la humanidad cuenta con un océano de memoria acumulada;
al alcance de los dedos y de los ojos hay en los últimos tiempos un
depósito universal de conocimiento, y parecería que casi cualquier dato
es accesible; sin embargo tal vez nunca había sido tan voluble nuestra
información, tan frágil nuestro conocimiento, tan dudosa nuestra
sabiduría. Ellodemuestra que no basta la información: se requiere un
sistema de valores y un orden de criterios para que ese ilustre depósito
de memoria universal sea algo más que una sentina de desperdicios.»