"La lentitud de los bueyes" (1979) y "Memoria de la nieve" (1982) son dos poemarios en los que laten las preocupaciones vertebrales de la obra de Julio Llamazares. Su lírica persigue la recuperación de las raíces culturales de un universo rural y mítico a través de la descripción épica y romántica del paisaje, de sus costumbres, de sus leyendas y de sus pobladores.