En junio de 2009 Javier Sinay encontró en internet la reproducción de un artículo de 1947, titulado Las primeras víctimas judías en Moisés Ville. Estaba firmado por su bisabuelo, Mijl Hacohen Sinay, periodista como él, y resultó espeluznante: hablaba de una serie de veintidós asesinatos cometidos, entre 1889 y principios del siglo XX, por gauchos criollos contra inmigrantes judíos llegados a esa zona de la provincia de Santa Fe desde Ucrania, huyendo de los pogroms del imperio zarista. Sinay comenzó a reconstruir la historia de su bisabuelo y la de ese pequeño pueblo santafesino, hasta dar con un costado poco conocido y brutal de la relación entre gauchos y judíos por aquellos años. En esa investigación, a la vez entrañable y tenebrosa, aprendió ídish para descifrar documentos antiquísimos, contrató a un detective para rastrear los ejemplares de Der Viderkol, el primer periódico judío de la Argentina y viajó repetidas veces a Moisés Ville, donde la cultura judía ha dejado huella en sus cuatro sinagogas y sus calles de nombres hebreos.