Un policial novedoso cuyo enigma es la desaparición del hijo de una pareja que acaba de separarse.
Los veinte años de matrimonio de Luciana se derrumban cuando Juan se enamora de Dominica, una chica de veinticinco. Unos días más tarde desaparece Matías, su hijo autista, y, como si todo eso fuera poco, tiempo después muere su madre. ¿Qué hacer cuando la rueda de la tragedia emocional sigue girando? Bajo el estímulo agudo del dolor y con algunas pocas convicciones que, no obstante, la van guiando a tientas en un verdadero mar de confusión, Luciana pretende reponerse y cambiar radicalmente de vida en una isla del delta. Ajena a los sucesos que intentó dejar atrás, ignora que Dominica la idealiza y se obsesiona en conocerla porque necesita una respuesta para su mayor intriga: ¿qué pasa en el fondo oscuro de una pareja estable?
Playa de barro es una de esas novelas potentes y, por momentos, impiadosas que dejan fuertes consecuencias en sus lectores, un policial novedoso que profundiza en los más truculentos dramas y patologías que pueden llegar a tejer los vínculos familiares.