Dacia Maraini fue una de las amigas más íntimas de Pier Paolo Pasolini, con quien compartió lecturas, proyectos cinematográficos e incluso casa, cuando Dacia tenía como compañero al escritor Alberto Moravia. Los tres viajaron por el mundo y en especial por África, viajes a los que a menudo se sumó Maria Callas. Cuando se cumplen cien años del nacimiento del poeta y cineasta, Dacia Maraini le escribe una serie de cartas en las que recrea su amistad, sus viajes, sus discusiones sobre el feminismo, sobre la escritura, la relación de Pasolini con su homosexualidad y con sus grandes amigas como Elsa Morante, Laura Betti, Silvana Mauri Ottieri o la propia Callas. Y revive con detalle el momento en que supo de su asesinato, el estupor y la incredulidad de los días posteriores, y la rabia presente todavía hoy porque nunca se ha investigado suficientemente quién lo ordenó. Pasolini fue siempre un personaje incómodo, radicalmente crítico con la sociedad de consumo y con la uniformización de las conciencias que ya veía venir. Muchos eran sus enemigos y los interesados en taparle la boca. La voz dolorosa e indignada de Alberto Moravia lo gritó en el funeral: "Ha muerto un gran poeta. Poetas como Pasolini, nace uno cada siglo". De la mano de Dacia Maraini, este libro nos abre las puertas a la comprensión de la persona y la obra de uno de los mayores creadores y de las mentes más lúcidas de las últimas décadas.