Regresa el mejor Halfon con una extraordinaria novela que bucea en su infancia en la Guatemala compleja y violenta del conflicto armado.
A finales de 1984, dos jóvenes hermanos guatemaltecos, exiliados desde hace años en Estados Unidos, vuelven a Guatemala para participar en un campamento de niños judíos en un bosque perdido de las montañas del altiplano. Poco saben de su país natal, y ya apenas hablan español. Sus padres les han insistido en que irían a pasar unos días en el campamento para aprender no sólo formas de supervivencia en la naturaleza, sino también formas de supervivencia en la naturaleza para niños judíos. Que no es lo mismo, les han dicho. Pero una mañana, los niños descubren que el campamento ha sido transformado en algo mucho más siniestro: ahora cada uno tendrá que encontrar su propia forma de sobrevivir. En este libro, el autor regresa a un acontecimiento de su infancia en la Guatemala compleja y violenta de los años ochenta, cuyos motivos y ramificaciones sólo se empezarán a dilucidar unas décadas después, durante reencuentros fortuitos en París y en Berlín con algunos de sus enigmáticos protagonistas. Una nueva pieza de la novela en marcha que es la obra de Eduardo Halfon, uno de los proyectos literarios más relevantes del panorama actual.
«Halfon es uno de los mejores escritores de su generación y, probablemente, de alguna otra, pasada o futura.» Manuel Hidalgo (El Cultural)
«Eduardo Halfon está escribiendo, sin que importe que sus libros se publiquen por etapas, la gran novela de su vida.» Süddeutsche Zeitung
«La aleación imposible de la identidad es el gran tema de Halfon, la ansiedad que subyace en su compulsiva puesta en escena del pasado.» The New York Times Book Review
«Una pequeña joya narrativa. (...) Con una técnica de control narrativo tan impecable como discreta, Eduardo Halfon refleja en su propia disyuntiva identitaria la de muchos y hurga en la herida de la formación de las identidades colectivas.» Domingo Ródenas (Babelia / El País)
«Escalofriante. Una historia ambientada en la selva de Guatemala que resuena en Gaza, en Donbass, en cualquier lugar donde las víctimas se terminan pareciendo a sus propios verdugos.» Santiago Roncagliolo