Lo mejor de la mirada crítica de Ángel Rama quedó plasmada en los ensayos que componen esta obra, referente indudable de los estudios literarios realizados desde América Latina. El crítico uruguayo ahonda aquí en la categoría de transculturación narrativa, la cual da cuenta de un fenómeno propio de los procesos creativos de la narración latinoamericana de mediados del siglo XX. Con ella describe la compleja asimilación de otras narrativas y culturas por parte de escritores latinoamericanos como Gabriel García Márquez, Juan Rulfo, João Guimãraes Rosa y, por supuesto, José María Arguedas, entre otros, quienes ubican sus relatos en las periferias de las ciudades-puertos cosmopolitas: el sertón, la sierra andina, el campo; pese a renunciar –en apariencia– al “deseo universalista”, estos narradores trastocan la tradición literaria latinoamericana y la renuevan, junto a muchos otros escritores, mediante este proceso transculturador.