El destino de todo un reino está en sus manos. La segunda parte del romance fantástico Un reino de promesas malditas
Cuando la hermana de Abriella fue vendida a los fae, ella creyó que la vida no podía ser peor. Pero ahora se encuentra atrapada en una red de mentiras creadas por ella misma –al amar a dos príncipes y no confiar
en ninguno– y las cosas se ponen cada vez más oscuras, cada vez más laberínticas.
Ante la amenaza de una guerra civil en la Corte Unseelie, Brie se siente incapaz de optar por un bando.
¿Cómo puede saber dónde está parada si ya no se reconoce a sí misma? En este laberinto de romances oscuros, cuanto más dañado se encuentra el reino Faerie, más ciertas se vuelven las profecías y el rol que Brie juega en el destino de este universo mágico, le guste o no.