Necesidad de una política de la Tierra, de Antxon Olabe, aborda una problemática que se halla en el punto de mira internacional: la crisis del cambio climático y las consecuencias devastadoras que está teniendo en nuestro planeta. La desaparición del mar de hielo en el Ártico, Groenlandia y la Antártida, el deshielo del permafrost siberiano, la disminución de la capacidad de sumidero de carbono de bosques y suelos, la creciente respiración bacteriana de los océanos, el posible colapso de la Amazonia o la degradación de los bosques boreales son algunos de los procesos que, hoy en día, tienen más de realidad que de ficción. "Implicarse en la respuesta a la crisis climática ha sido la misión de mi vida adulta", explica el autor. El mundo se encamina hacia un nuevo orden de la energía, y eso exige pensar el siglo XXI desde la emergencia climática y ecológica, porque la crisis del clima no ha hecho más que poner en evidencia que se trata de un problema cultural, un modo de estar en el mundo propio de una civilización que ha concebido su relación con la naturaleza, la Tierra y su biosfera en términos de dominación y depredación en lugar de preservación, cuidado e interdependencia. Con un conocimiento y una información exhaustivos, Olabe nos ofrece un libro interesantísimo, de lectura imprescindible para conocer a fondo esta grave problemática que supone el cambio climático y que requiere una respuesta de primer orden desde las principales potencias mundiales.