En esta biografía del presidente Marcelo Torcuato de Alvear,
el autor trasluce una cálida simpatía hacia el personaje que no inhibe
la crítica severa. En ella aparecen no solo las decisiones políticas más
importantes, sino escenas y episodios reveladores de la sociedad de
entonces y de sus contradicciones. La infancia cómoda y respetable de
Alvear, sus viajes a Europa, su matrimonio con Regina Pacini, sus
actuaciones políticas tempranas, su amistad con Yrigoyen, la vocación
que lo obligó a asumir una labor que entrañaba peligros, molestias y
constantes renunciamientos, resultan testimonio de valor incalculable
tanto en lo histórico como en lo social.
La Argentina es un país sin aristocracia: «Basta trepar un poco el árbol
genealógico para topar con el abuelo contrabandista o bolichero», dice
con gracia Félix Luna en este libro, publicado por primera vez en 1958.
En el caso del presidente Marcelo Torcuato de Alvear su apellido,
ciertamente ilustre, no le impidió afiliarse en su juventud al partido
radical y sostener este compromiso, en el triunfo y en la derrota, hasta
en fin de su vida.