Nos encontramos ante un producto artístico plenamente oriental. El problema de que los árabes no fueran creadores de formas artísticas propias no resta mérito alguno a su labor. Las soluciones arquitectónicas por ellos adoptadas habían sido empleadas por persas y bizantinos desde muchos siglos atrás, pero lo cierto es que sólo los árabes lograron hacer de este arte un arte universal.