No se puede hablar del arte románico sin haber paseado antes un poco por los pasillos del feudalismo. La aristocracia feudal del Medievo es la clase social creadora del arte románico, tanto en sus manifestaciones religiosas como civiles. El románico fue un arte esencialmente religioso, pero también feudal, aristocrático. Los altos clérigos y abades medievales tenían los mismos intereses políticos y económicos que la nobleza.