Esta obra es una novela de juventud de Alberto Vázquez-Figueroa. Quizá el conjunto de su producción no podría entenderse plenamente sin incluir parte de sus orígenes. Para su autor, el fondo del mar, la fantasía y la aventura lo significaban todo en el momento de escribir Bajo siete mares. A finales de los años cincuenta, el submarinismo era un deporte que aún estaba en sus comienzos. Hasta 1960 no se celebró en Barcelona el primer Congreso Mundial de Actividades Subacuáticas. Tres años antes, Alberto Vázquez-Figueroa fue uno de los primeros profesores de inmersión en el buque escuela Cruz del Sur.