Bombo Ávalos nació a mediados del siglo XX en una comarca azucarera de Tucumán. Antes de cumplir dieciocho años se enroló en el Ejército Revolucionario del Pueblo y formó parte de la Compañía de Monte. Allí recibió el nombre de guerra Armando y alcanzó el grado de capitán. Fue uno de los combatientes más buscados y, durante mucho tiempo, de los más escurridizos. En 1976 los militares lograron secuestrarlo y nunca más se supo de él. Hasta que en 2013 reapareció como un espectro fugaz en su Santa Lucía natal. Y el misterio se propagó. ¿Está vivo el Bombo? ¿Cómo es posible que haya vuelto?
Mario Santucho convierte ese dato inesperado en una investigación audaz y fascinante. La historia lo interpela de una manera nueva. "Por qué tanta obstinación con la biografía de Bombo en lugar de reconstruir la epopeya de mi viejo (el famoso) o de mi madre (a quien todavía conozco demasiado poco)", se pregunta el autor en este libro. La respuesta está en una aguda reflexión sobre la violencia y su espinosa relación con la política. "La violencia que ya fue, es decir, la lucha armada. La que persiste pese a los esfuerzos por barrerla bajo la alfombra. La que vendrá y no sabemos cómo", advierte.