Hace no tanto tiempo en España había personas que arriesgaban su libertad, su integridad física e incluso su vida por sus ideas. Fueron héroes y heroínas anónimos, y gracias a su lucha por la democracia, las libertades y la justicia social, hoy nuestras vidas no son tan duras como las que ellos vivieron. Compartían las virtudes y los defectos de su época, pero eran personas capaces de sobreponerse a las experiencias traumáticas: la prisión, las torturas, los insultos, las dificultades para reconstruir sus vidas… sus relatos de lo vivido en esa época, recogidos en este libro, son valiosos testimonios de un tiempo de sacrificio e ideales. A pesar de sus errores, fueron protagonistas de un cambio necesario. No fueron las únicas, pero sí fueron las más numerosas, las más entregadas, las más pertinaces. Y la organización a la que pertenecían, el Partido Comunista de España, era “el partido”, no hacía falta especificar nada más. Hubo quienes tiraron la toalla, quienes cambiaron de opción política y quienes continuaron afiliados toda su vida. Algunos, con el tiempo, abandonaron la militancia desencantados. Otros siguieron en un contexto muy diferente. Todos se merecen el reconocimiento de la sociedad por su esfuerzo en el logro de la reconciliación democrática.