Estamos en medio de un nuevo evento de extinción: la sexta
extinción masiva en la tierra y esta vez causada por el hombre.
Todas las especies se extinguen tarde o temprano, pero nosotros
hemos acelerado ese proceso natural varios cientos de veces y
ahora está ocurriendo delante de nuestros ojos. La extinción tiene
una finalidad aterradora. Y muchas especies ya se han perdido para
siempre; hay poco que podamos hacer al respecto. Sin embargo, lo
que sí podemos hacer es reflexionar, recordar y, en última instancia,
reconocer la pura verdad. Debemos ver el mundo natural tal y como
es, y no como queremos que sea. Nuestra trayectoria ha beneficiado
a una sola especie: la humana. Para todos los demás seres, desde
las aves hasta los insectos y los corales, desde las plantas hasta
los líquenes y los hongos, el futuro, para bien o para mal, está en
nuestras manos.