Al pie de los agrestes Dolomitas de Belluno y de las Vette Feltrine, siguiendo el curso del Piave, se detuvo la influencia veneciana, que dejó obras maestras dispersas de arte y arquitectura; más al norte, el Agordino es un microcosmos cerrado y laborioso, surcado de estrechos valles vírgenes y coronado por montañas icónicas como el Civetta, el Agner y la Moiazza. Y, por último, está el Primiero, adorado por esquiadores y excursionistas, con su aire vagamente austríaco, sobre el que se ciernen las irregulares Pale di San Martino, que no son más que un amplio pasillo que une dos mundos: los Dolomitas vividos y los imaginados.
• La elegante Belluno y la recoleta Feltre, llena de iglesias y museos fascinantes.
• El valle del Mis, con la Cascata della Soffia y los Cadini del Brenton.
• Una pinta refrescante en la Birreria Pedavena antes de subir a la Busa delle Vette Grandi.
• Mapas.
• Transporte.
Incluye: Belluno, Sospirolo, Sedico, Feltre, Vette Feltrine, Pedavena, Lamon, Agordino, Agordo, Taibon Agordino, Falcade, Alleghe, Mezzano, Primiero San Martino di Castrozza.