Esta obra de Diego Rubinzal contiene las tres condiciones fundamentales para abordar la economía política: existencia de una actitud crítica, abordaje de la realidad y tratamiento de la relación entre orden interno y contexto externo. Por lo tanto, en la tradición clásica, es un texto de “economía política”. Observa la realidad y formula sus propuestas desde una perspectiva nacional, un abordaje que no se reduce al análisis de las variables económicas y, por último, el tratamiento de la economía argentina en el contexto de sus relaciones internacionales. Su amplitud y ambición da respuesta a cuestiones principales y deja abiertos interrogantes que le plantean al autor una rica agenda de investigaciones futuras. Ente ellas, su visión sobre la trayectoria de la economía argentina después de la crisis terminal del 2001, momento en el cual concluye el contenido de la obra.