La lectura y la escritura, dos caras de una misma moneda, son herramientas para mejorar la memoria, potenciar indeciblemente la capacidad de escuchar, hablar y recordar; de acumular y transmitir experiencias e información. Lo habitual es que para aprender a leer y escribir; de manera más o menos elemental, un niño pase diez o doce años en la escuela. Nuestra educación básica está todavía diseñada para alfabetizar a los estudiantes, no para formarlos como lectores. El propósito de este libro es ayudar a padres y maestros a acercarse a esta meta, a partir de actividades cotidianas.
Ochenta y nueve de cada cien mexicanos saben leer y escribir, pero no son lectores. Leen y escriben todos los días por razones utilitarias, para estudiar, trabajar e informarse de lo indispensable. El reto actual es que conviertan la lectura y la escritura en un medio cotidiano de aprendizaje, de crecimiento intelectual y emocional, que descubran los placeres de la lectua y la escritura.
A partir de ensayos, conferencias y extractos de ponencias, Felipe Garrido pretende formar lectores que comprendan mejor lo que leen, que lean todos los días y escriban con frecuencia; que incluyan cuentos, novelas, ensayos, teatro, poemas entre sus lecturas, porque la literatura exige más de los lectores, los pone a prueba, los perfecciona.