Las redes sociales, los aplausos colectivos y los encuentros con Julia, su vecina, no servirán para sosegar a Juan, más obsesionado cada día que pasa con el estado de salud de sus vecinos. Al contrario, la declaración del estado de alarma, la intoxicación de noticias y la tos que escucha a través de la pared le llevarán a una paranoia de consecuencias impredecibles.Un thriller psicológico intenso y vívido. Un libro urgente, fresco, una ficción reveladora en medio de una crisis que nadie vio venir.