De regreso de los Pilares de la Creación y seguidos de cerca por unas extrañas aves que parecen vigilarles, Richard y sus compañeros descubren la existencia de un imperio aislado y desconocido que ha caído bajo las garras de la Orden Imperial. Para liberar a sus habitantes, Richard tendrá que enfrentarse no sólo a los problemas que ha empezado a causarle su don, sino también a un misterioso y sanguinario personaje llamado Nicholas, creado por las Hermanas de las Tinieblas siguiendo instrucciones de Jagang.