«Un libro lírico, genuino y cautivador.»
The Daily Telegraph
Elizabeth Pringle, nacida antes de la Primera Guerra Mundial, es una solitaria y melancólica figura muy familiar para los habitantes de la isla escocesa de Arran, aunque nadie la conozca realmente... Cuando Elizabeth muere lega su hermosísima casa de Holmlea a una completa desconocida, Anna Morrison, a quien observaba treinta años atrás cuando esta era una joven madre que paseaba a su hija Martha en su carrito de bebé. Pero una avanzada demencia impide a Anna llevar una vida normal y recordar nombres e historias del pasado, así que ahora le corresponde a Martha descubrir por qué su madre ha heredado la casa en tan extrañas circunstancias y, al hacerlo, quizá también consiga dejar atrás su propio pasado. Sin embargo primero tendrá que encontrar la respuesta a la siguiente pregunta: ¿quién era Elizabeth Pringle?
Para acercarse a la antigua propietaria de Holmlea, Martha, ayudada de Niall y Saul, únicos amigos de la anciana durante sus últimos años de vida, tendrá que ir atando cabos a través del contenido de la casa: cuadros, fotografías, objetos personales, y también de las memorias escritas por la difunta anciana y legadas a Saul, para poder finalmente sacar a la luz el pasado de esta misteriosa mujer.