En esta nueva excursión, Felipe, Elvis y su tío atraviesan la Patagonia, Buenos Aires y otras regiones de este país, donde se ven envueltos en una serie de hallazgos asombrosos. Descubrirán que los vampiros no son seres de leyenda o invenciones populares, sino individuos auténticos, reales, con nombre propio. En este caso, se trata de criminales de guerra nazis que se ocultaron en nuestro continente para eludir a las autoridades internacionales, que los buscaban por las torturas y los crímenes cometidos. La mayoría de ellos se cambiaron sus nombres, sacaron pasaportes falsos y se camuflaron en nuevas profesiones.