El noble inquilino mira la vida humana a través de la ventana que le ofrece el mundo incorpóreo de las emociones. Desde allí, puede el lector apreciar su desnudez, mientras le observa detenidamente con los ojos de la razón. Su contenido va más allá de los límites conocidos por la literatura dedicada al desarrollo personal, al conjugar la espiritualidad con nociones extraídas de la filosofía, la historia, la psicología, la biología, la neurología y la física cuántica. Relatando sus propias experiencias, el autor recoge en estas páginas el claro testimonio de cómo con dedicación, disciplina, compromiso y confianza es posible ver y vivir la vida de una manera más edificante.compromiso y confianza es posible ver y vivir la vida de una manera más edificante.