Una pata empolla sus huevos cerca al lago, cuando por fin nacen hay uno que es diferente a los demás, sus plumas no son amarillas sino grises y es mucho más grande que el resto. A pesar de que ella lo quiere, los demás patos se burlan de él, así que el patito feo decide escapar.
Primero llegará a un lago donde cazadores y perros lo espantan; luego pasará por la casa de una anciana, donde sus mascotas lo harán salir volando; por último, llegará a una casa de familia, donde tampoco es bien recibido. Triste y rechazado, el pato decide esperar a que llegue la primavera cerca de una granja. Sin saberlo, esta estación le traerá una sorpresa maravillosa: ya no es un patito feo pues se ha convertido en un blanco cisne.