Un viaje por los casi cien años del Dr. Esteban Laureano Maradona que intenta ser un recorrido por su interior y su esencia. La providencia quiso que, en 1935, el convoy que lo devolvía a la ciudad de Buenos Aires, al regresar de su participación en la guerra del Chaco, se detuviera en el medio de la selva, en Guaycurú, Formosa. Allí, se quedó por más de cincuenta años, donde además de médico, fue el primer historiador indigenista, botánico y zoólogo.