El título que ampara a este libro, Ensayo de contraconquista, dice Gonzalo Celorio, "evoca a Lezama Lima y se aplica particularmente a la serie de textos que da cuenta del tránsito del barroco español, como arte de Contrarreforma, al del barroco americano – y sus derivaciones neobarrocas-, como arte de contraconquista". La definición bien puede hacerse extensiva y abarcar buena parte de la literatura americana de nuestra lengua.
Gonzalo Celorio se desliza entre sus lecturas y la experiencia vivida como dentro de un mismo viaje. Ensayo de contraconquista se compone de cinco grandes zonas de reflexión. Parte de sus orígenes personales que lo vinculan con la literatura y la historia de Cuba, se detiene en la herencia barroca del mundo hispanohablante y en su actualidad; vuelve a partir en busca de sus largas visitas a la familia de sus pasiones en prosa – Reyes, Borges, Cortázar, Fuentes, la literatura fantástica – y en verso – López Velarde, Pellicer, Villaurrutia – para volver de regreso a casa con la compañía cercana y familiar de sus maestros Luis Rius, Sergio Fernández, Bonifaz Nuño y Edmundo O'Gorman. Curso y decurso de los encuentros afectivos y la disciplina del escritor, estos ensayos son la bitácora de un periplo gozoso y memorable: una contraconquista por vía de la inteligencia y el apasionamiento.