La Historia de la Traducción precisa, para su estudio cabal, un profundo conocimiento de la literatura y la lengua propias como requisito previo. Se necesita conocer bien la literatura de recepción, tener una visión panorámica de la historia y entender los procesos estéticos (y de política estética) en que está implicada una cultura escrita, cuáles son las tendencias, los lenguajes, las direcciones que siguen sus autores, sus lecturas, sus "poéticas". Cada uno de los capítulos de este libro (Edad Media, Siglos de Oro, siglo XVIII, siglo XIX y siglos XX-XXI) comprende el estudio por épocas, estéticas literarias o autores, pues a pesar de la correspondencia que pudiera establecerse, son varios los movimientos literarios, las estéticas y las ideas lingüísticas que conviven en un siglo y aun en una generación.