«Cierro los ojos. Todo está ahí, dentro de mi cabeza. Una neblina que se extiende sobre las ondulaciones del jardín. El intenso picor del frío en la nariz. Tengo que hacer un esfuerzo consciente si quiero recordar qué más pasó el día en que encontramos el cadáver, el cadáver de Natalie…»
Como cada año, Jane acude a la reunión de su familia política, los Martello, en su casa de campo, a pesar de que está a punto de divorciarse de su marido, el mayor de la dinastía. Pero no será como en otras ocasiones: a pocos metros de la casa acaban de encontrar los restos de Natalie, la hija de los Martello, desaparecida veinte años atrás, tras una fiesta como ésa, cuando sólo tenía dieciséis. Jane bucea en su memoria con ayuda de un psicoanalista bastante peculiar: ¿es posible que los recuerdos de aquella infancia feliz en compañía de una gran familia unida se hayan distorsionado? ¿No se hallará en los rincones más oscuros de sus recuerdos la clave de lo que le sucedió a Natalie… o incluso la identidad del responsable?