Muchos visitantes pasan de largo este rincón del país, camino de los epicentros turísticos de Loch Ness y Skye, pero se pierden una parte de Escocia tan bonita y diversa como la occidental, más conocida. En esta región se encuentran dos de las cuatro grandes ciudades escocesas: Dundee, la ciudad de yute, mermelada y periodismo, hogar del Discovery, el famoso barco de exploración antártica del capitán Scott, y del asombroso museo de diseño V&A Dundee; y Aberdeen, la ciudad de granito, un puntal económico alimentado por el petróleo del mar del Norte. Angus es una región rica en tierras de cultivos, con panorámicos valles salpicados por las misteriosas piedras que dejaron (hace mucho tiempo) los pictos, mientras que Aberdeenshire y Moray reúnen la mayor concentración de castillos señoriales escoceses y docenas de destilerías de whisky a lo largo del río Spey.
• Descubrir el mejor diseño escocés e internacional en el V&A Dundee, un museo arquitectónicamente asombroso, en el corazón del reurbanizado litoral de Dundee.
• Meditar sobre el significado de las misteriosas piedras de Aberlemno, grabadas con símbolos extraños y escenas de lucha.
• Disponerse a saborear la mejor cocina escocesa en el restaurante Tayberry de Broughty Ferry.
Incluye: Dundee, Broughty Ferry, Arbroath, Kirriemuir, Aberdeenshire, Aberdeen, Stonehaven, Moray, Elgin, Dufftown y Aberlour, Banff y Macduff y Portsoy.