Desde la meseta subártica de los Cairngorm hasta las colinas onduladas del alto Perthshire y los picos del Glen Coe, las sierras centrales de las Highlands escocesas dan fe del poder cincelador del hielo y el clima. Aquí el paisaje exhibe toda su majestuosidad, con altos cerros de roca y brezal, ceñidos por valles arbolados y cascadas. No es de extrañar que esta parte del país sea un paraíso para los amantes de los deportes al aire libre. Aviemore, Glen Coe y Fort William atraen a senderistas y montañeros en verano, y a esquiadores, snowboarders y alpinistas en invierno. Inverness, la capital de las Highlands, proporciona relax urbano, mientras que el cercano Loch Ness y su esquivo monstruo añaden un toque de misterio. Desde Fort William, campamento base para escalar el Ben Nevis, la carretera de las islas pasa por las playas de Arisaig y Morar hasta Mallaig, el trampolín para las islas de Eigg, Rum, Muck y Canna.
• Caminar entre las colinas, lochs y bosques de Glen Affric, el valle más bonito de Escocia.
• Pasear por bosques caledonios ancestrales en Rothiemurchus Estate, en el corazón de los Cairngorm.
• Llegar a la cumbre de Ben Nevis, la montaña más alta del Reino Unido y disfrutar de las vistas.
Incluye: Inverness, Loch Ness, Montes Cairngorm, Aviemore, Alto Perthshire, Glen Coe, Fort William, Carretera de las islas e Islas menores.