El viajero que llegue hasta el sudeste de Luzón, una de las partes más olvidadas de Filipinas, descubrirá una tierra excepcional y muy diversa, donde hallará, entre otras cosas, criaturas de las profundidades en Donsol y Ticao, romanos y flagelaciones durante la Semana Santa de Marinduque, rodeos y carreras de cangrejos en Masbate.
Destino frecuentado por surfistas y aventureros, los unos atraídos por las olas que se forman en este tramo de costa azotada por fuertes vientos, y los otros por los volcanes activos de Mayón, Isarog y Bulusán.
• Bucear en Donsol con los afables tiburones ballena de Bícol.
• Hacer una excursión en quad hasta las faldas del monte Mayón, el volcán más hermoso de Bícol.
• Probar en Legazpi la mejor cocina picante de la región.
Incluye: Bicol, Naga, Parque Nacional del Monte Isarog, Península de Caramoan, Legazpi, Donsol, Catanduanes, Virac, Masbate, Marinduque.