Playas paradisíacas, arrecifes de coral, el mamífero más pequeño y el pez más grande del mundo… las Bisayas orientales son el corazón de Filipinas. El paisaje es de ensueño: ya sean las colinas de Chocolate de Bohol, los bancos de millones de sardinas en Moalboal, las olas y las cuevas de Sámar o las cascadas y bancales de arroz de Biliran.
La ciudad de Cebú posee un cierto aire cosmopolita, pero las del resto de la región no tienen mucho que ofrecer. En su lugar, se aconseja explorar los rincones más apartados: la isla de Bantayán y sus hermosas playas; la de Malapascua, la meca del buceo; Calicoan, ideal para surfear; y las extraordinarias bahías de arena rosada de la remota Sila.
• Contemplar tarseros, caletas, las colinas de Chocolate y la diversa vida marina de los arrecifes en Bohol.
• Descubrir los islotes lejos de la orilla y vivir la experiencia de ver de cerca un tiburón zorro en la isla de Malapascua.
• Disfrutar del paraíso para los buceadores a pulmón, de la fiestera ciudad y de los bancos de sardinas en Moalboal.
Incluye: Ciudad de Cebú, Isla de Malapascua, Islas Camotes, Bohol, Tagbilaran, Isla de Panglao, Colinas de Chocolate, Leyte, Isla de Biliran, Isla de Maripipi, Samar.