A lo largo de 430 km de frontera natural entre España y Francia, los Pirineos componen el lado más salvaje del país. Esta dentada cadena montañosa alberga algunos de los paisajes más prístinos de Francia, además de cobijar a unas pocas de sus especies de animales más raras y amenazadas, entre ellas el buitre leonado, el rebeco pirenaico y el oso pardo. Desde 1967, el Parc National des Pyrénées protege 457 km² de los Pirineos, lo que garantiza la conservación de unos pocos valles, lagos y pastos para las generaciones venideras.
• Pic du Midi: Admirar las vistas desde su elevado observatorio.
• Cirque de Gavarnie: Emprender una caminata hasta este anfiteatro de montaña.
• Parc Animalier des Pyrénées: Observar fauna endémica amenazada.
• Mapas.
• Transporte.
Incluye: Pau, Lourdes, Parc National des Pyrénées, Valle de Aspe, Valle de Ossau, Cauterets, Valle de los Gaves, Bagnères de Luchon, Valle del Ariège.