Vasto, escasamente poblado y envuelto por la selva, el departamento de mayor tamaño y más septentrional de Guatemala es un destino con muchas posibilidades de exploración. Bien sea por los misterios mayas del período clásico, la prodigalidad de la jungla o para solazarse junto a un lago, todo se le ofrece aquí en abundancia.
• Observar el techo selvático desde el altísimo Templo IV de Tikal.
• Atravesar la selva en una caminata hasta la vasta y apenas excavada ciudad maya de El Mirador.
• Despertar con el aullido de los monos en la laguna Petexbatún.
Incluye: Sayaxché, Finca Ixobel, Flores y Santa Elena, El Remate, Tikal, Uaxactún, Yaxhá, Nakum y El Mirador.