Un tenso thriller político inspirado en acontecimientos reales de la historia argentina reciente, principalmente la pista iraní en las causas que investigan los atentados contra la Amia y la embajada de Israel y las acusaciones de encubrimiento lanzadas contra figuras centrales de la política. Intrigas diplomáticas, oscuros crímenes sin resolver y una bella agente del Mossad con una pulsión tanática y sexual irrefrenables.
Un diplomático argentino muerto en circunstancias sospechosas.
Una agente secreta del Mossad siguiendo la pista iraní en Buenos Aires. Una presidenta asediada.
Un escándalo internacional a punto de estallar.
Un diplomático argentino aparece estrellado en la vereda de un pequeño restaurante en la capital belga. Su cuerpo recorrió quince pisos en caída libre. En principio, todos los testigos y los responsables de la investigación asumirán que se trató de un suicidio, salvo por un detalle: las ventanas del departamento desde el cual cayó la víctima fueron cerradas por dentro.
A esta primera muerte rodeada de intriga le siguen otras, todas violentas, todas vinculadas en distinto grado con la investigación de las negociaciones entre Buenos Aires y Teherán. Todas asociadas, en última instancia, con el presunto intento de encubrimiento de la pista iraní en los atentados contra la AMIA y la embajada de Israel que tuvieron lugar en la capital argentina años atrás.
Casi sin proponérselo, la bella agente del Mossad Samira Haidar y su amante, el asesor financiero Leandro Flemming, se encuentran de pronto atrapados en una intriga internacional -de Buenos Aires a Europa con escalas en Punta del Este y el Caribe-, en un juego de gato y ratón con El Director, oscuro agente y ejecutor de múltiples identidades, y en una pesquisa detrás de la verdad sobre el acuerdo entre los líderes de Argentina e Irán, donde toda semejanza con hechos y personajes reales es mucho más que pura coincidencia.