El mundo corsario de Euskal Herria vivió su apogeo durante los siglos XVI y XVII, hasta el punto de que para muchas villas costeras la piratería llegó a ser una forma de vida, al tiempo que los marineros vascos navegaban bajo diferentes banderas. Además, los avatares del corso quedaban reflejados en el conjunto de la sociedad vasca, aunque de formas diferentes según la intensidad y periodicidad con que afectaban a las distintas poblaciones. Tal vez por ello, sorprende el hecho de que miles de valerosos marineros embarcados en centenares de veleros operando en todos los mares del globo durante varios siglos hayan podido caer en el más completo olvido. Historias de corsarios vascos es el fruto de una ardua tarea de investigación y selección llevada a cabo por José Antonio Azpiazu. Mediante anécdotas, datos y noticias, el historiador oñatiarra nos desvela un mundo apasionante, fascinante y, por qué negarlo, incluso novelesco. Pero este mundo de carácter fronterizo, debido a que se mueve en tierra de nadie, caracterizado por cierta tendencia a evadir las normas, en manera alguna es irreal o inventado. Ha estado muy presente entre nosotros.