«Éste es apenas un rincón de la anomalía de México, un país roto, con más de 30 mil desaparecidos en su geografía»
Blanche Petrich
Este libro documenta las desapariciones de al menos diez adolescentes - todas estudiantes, con el futuro por delante- en la zona de Ecatepec y Los Reyes Tecámac, en el Estado de México. Lydiette Carrión narra con vértigo la odisea de los padres para encontrar a sus hijas; la precariedad de las investigaciones, realizadas por un sistema policiaco laberíntico, corrupto, criminal y altamente ineficaz, y la estigmatización que sufren las víctimas aún en la muerte. Al final, las autoridades vincularon varias de las desapareciones a Erick Sanjuán Palafox, alias el Mili, y sus cómplices, capturados en 2014 y acusados de feminicidio y narcomenudeo tras un proceso lleno de irregularidades.
Aunque este caso confirmó, por la juventud de los victimarios y la brutalidad con que violentaron a la única joven de la que se ha podido esclarecer con certeza su destino, que estamos ante una crisis humanitaria de grandes proporciones, muchas dudas aún prevalecen: ¿cuántas de las desapariciones, de los feminicidios, pueden atribuirse a la banda del Mili? ¿Será que este caso sacó a la luz la evidencia de un tipo de crimen organizado más sádico y voraz? ¿Quién está detrás de las desapariciones que todavía ocurren en la zona?