Helen Graham, profesora de la Universidad de Londres y autora de valiosos estudios sobre la España contemporánea, nos muestra la contienda española como la primera experiencia de un nuevo tipo de conflicto que iba a emplear la matanza de civiles como instrumento de cambio político: "una guerra de enemigos íntimos y matanzas locales" que se extendió por toda Europa a lo largo del siglo XX, en que millones de seres humanos iban a ser sacrificados por sus propios compatriotas, incluso por sus vecinos. A la luz de esta visión, que considera la violencia como parte esencial de un programa político, las historias de las víctimas humanas del conflicto español que ha escogido como ejemplo cobran un nuevo y más trágico sentido.