Según Enrique Krauze, la historia política de México ha sido siempre, en gran medida, una proyección de la biografía de sus gobernantes. Siguiendo el hilo de sus anteriores libros, con La presidencia imperial traza, mediante el penetrante retrato psicológico de nueve presidentes mexicanos (desde Manuel Ávila Camacho hasta Carlos Salinas de Gortari), todos ellos pertenecientes al partido único, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), un audaz panorama de la historia de México desde 1940 hasta nuestros días. En México, donde este libro se ha convertido en referencia obligada para muchos miles de lectores, es considerado como la “crónica de la corrupción nacional”. Al dar cuenta de más de cincuenta años de lo que Vargas Llosa tildó de “dictadura perfecta”, Krauze, en el más ambicioso e irónico de sus libros, muestra el universo enrarecido de un sistema político cuya primera meta ha sido siempre la de proteger con doble llave los secretos de la familia.