Una explicación rápida pero bien fundada sobre el agudo conflicto
desarrollado entre el gobierno nacional y los productores agropecuarios,
desde sus profundas raíces históricas.
Autoridades gubernamentales, dirigentes de organizaciones
rurales y de partidos políticos, comunicadores, han planteado distintas
visiones que muestran el desconocimiento predominante sobre el agro
argentino en unos casos y la estrechez de miras en relación a cómo
imaginarlo integrado a la sociedad, en otros.
«La rebelión del campo» aborda los temas estructurales que
contextualizan y explican el tipo de actores sociales movilizados en el
agro, describiendo las consecuencias de los avances tecnológicos en la
estructura agraria y las nuevas formas de articulación entre el capital
y la tierra. Contratistas de maquinarias, pequeños y medianos
productores, pools de siembra de diverso tamaño, rentistas, son los
protagonistas de una realidad poco conocida. Igualmente se destacan los
cambios en el mercado mundial de alimentos y los impactos sobre la
producción agroindustrial argentina.
Se plantean aquí los antecedentes de otros conflictos similares y, desde
la agenda de temas propuesta a raíz del enfrentamiento, se analizan la
demonización de la soja, la historia y el rol de las retenciones y la
relación entre las exportaciones y la provisión de alimentos baratos
para la población local. Se describen las características y el papel de
las organizaciones agrarias argentinas y las tradiciones ideológicas de
sectores urbanos en relación con las cuestiones rurales. Finalmente, se
ofrece una respuesta concreta a la pregunta clave: ¿cuáles son los
desafíos que deberán afrontarse más allá del conflicto si se pretende
consolidar al sector agroindustrial como un pilar decisivo de la
economía y de la sociedad?